Luego de que el presidente Alberto Fernández pusiera en marcha durante su campaña electoral un plan de lucha de lucha contra el hambre, del cual invitó a participar a todos los sectores, se reavivó el interés por los beneficios que proporciona el Yogurito tucumano a niños, niñas y adolescentes. En esta línea, la titular del Consejo Federal de Políticas Sociales, Victoria Tolosa Paz y la presidenta del CONICET Nación, Ana María Franchi, visitaron este martes Tucumán para conocer las ventajas del proyecto del CERELA-CONICET y otros productos lácteos desarrollados en la provincia por científicos locales.
El Yogurito tucumano es un yogur monodosis que tiene el probiótico CRL-1505, cuya principal ventaja es aumentar las defensas naturales y prevenir infecciones intestinales y respiratorias. "Actualmente alcanza a 300.000 niños potenciando al mismo tiempo la producción local", señalaron desde Gobierno, para destacar el trabajo articulado del área de Desarrollo Social, Educación y Salud junto a los científicos del CONICET y a los productores del sector privado.
Organizado por la Secretaría de Estado de Innovación y Desarrollo Tecnológico (Sidetec), participaron del encuentro de este martes en las instalaciones del Cerela el secretario de Innovación y Desarrollo Tecnológico de Tucumán, Mariano Garmendia; el subsecretario de Coordinación Institucional del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Nación Pablo Nuñez; y la investigadora superior del Conicet, Graciela Font.
El Yogurito tucumano integra el Plan Integral de Nutrición del Ministerio de Salud Pública provincial.
En enero, el intendente de Tafí Viejo y presidente de la Federación Argentina de Municipios (FAM), Javier Noguera, el subsecretario de Innovación y Desarrollo Tecnológico de Tucumán, Roberto Tagashira y la responsable del proyecto Yogurito, Pía Taranto estuvieron en el Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales para llevar esta iniciativa. Desde este encuentro, el objetivo es que Yogurito trascienda las fronteras y llegue a otras provincias.
“Nos mueve estar acá y empezar a trabajar con ejemplos que ya han mostrado que modificaron la posibilidad del desarrollo de los niños en la primera infancia”, dijo Tolosa respecto al yogur, el polvo biosec y el queso con este probiótico desarrollados en Tucumán.
“La producción de estos productos nos parece central para poder empezar a trabajar en algunas provincias que tenemos drama con respecto a la situación de nuestros niños y creemos que Tucumán ha avanzado muchísimo, que el CONICET hizo una política pública en esta provincia y creemos que Argentina tiene mucho para transferir entre provincias junto con el acompañamiento del Gobierno nacional y los Gobiernos provinciales”, cerró.
A su turno, la presidenta del CONICET aseguró que el probiótico social “es una entre las tantas demostraciones que la ciencia y la tecnología contribuyen al bienestar de la gente”. Y completó que "en Tucuman lo tienen hace 10 años, hay 500 escuelas provinciales que están utilizando el Yogurito y esto va a permitir seguir adelante con otras provincias que están en situación muy complicadas en cuanto a la desnutrición”, concluyó.
Por su parte, el subsecretario de Coordinación Institucional del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Nación agregó que se busca “hacer una ciencia transversal, queremos que las diferentes disciplinas del sistema científico se logren articular en políticas públicas”.